Los OKR (Objetivos y Resultados Clave) son una metodología de gestión que ayuda a las empresas a establecer, comunicar y monitorear sus metas y resultados. Originada en Intel durante la década de 1990, esta metodología ha sido adoptada ampliamente por diversas industrias del mundo B2B, para mejorar el rendimiento y la eficiencia.

En ese sentido, implementar los OKR en tu empresa B2B, permite definir objetivos claros y medibles que están alineados con la estrategia de la empresa. Estos son algunos ejemplos de OKR orientados al B2B, cortesía de Eintrade:

Logística B2B:

Objetivo: Ahorrar en costes de transporte.

  • Resultado Clave: No sobrepasar el coste de transporte de xxx Euros por mes.

Objetivo: Reducir los tiempos de entrega a clientes internacionales.

  • Resultado Clave: Reducción de reclamaciones de los clientes y de stocks de producto acabado en el almacén.

Objetivo: Mejorar la comunicación y relaciones con los clientes.

  • Resultado Clave: Reducción del número de comunicaciones sobre temas recurrentes con clientes.

Marketing B2B:

Objetivo: Generar más leads a través de marketing no pagado.

  • Resultado Clave: Escribir 1 blog por semana.
  • Resultado Clave: Aumentar las conversiones de email a blog en un 10%.

Objetivo: Reemplazar leads de eventos con leads digitales.

  • Resultado Clave: Aumentar la asistencia a webinars en un 50%.
  • Resultado Clave: Aumentar las vistas del canal de YouTube en un 10%.

Producto B2B:

Objetivo: Ser el mejor producto en el mercado.

  • Resultado Clave: Lanzar 5 nuevas características por trimestre.
  • Resultado Clave: Reducir el tiempo de onboarding de 1 hora a 10 minutos.

Finanzas B2B:

Objetivo: Tener el margen más alto en el mercado.

  • Resultado Clave: Aumentar la frecuencia de compra de clientes de 2 veces al año a 3.
  • Resultado Clave: Adoptar la fijación de precios basada en el cliente.

Ahora bien, ¿cómo podemos identificar que nuestra empresa B2B requiere OKR’s? A este respecto, el portal Workpath comparte estas cinco señales:

  1. Estrategias solo teóricas: Si las estrategias se comunican solo cualitativamente y no se entiende su impacto diario, los OKR ayudan a traducirlas en acciones mensurables.
  2. Desconexión entre estrategia y ejecución: Si la estrategia se define sin considerar su implementación práctica, los OKR pueden facilitar una visión unificada y ajustes en tiempo real.
  3. Foco en los resultados equivocados: Cuando se mide el éxito solo por indicadores de proceso, no por el valor para el cliente, los OKR refocalizan los objetivos hacia el impacto en los clientes.
  4. Implementación lenta de estrategias: Ante la necesidad de agilidad en un entorno cambiante, los OKR permiten una adaptación rápida y una sincronización efectiva entre planificación y acción.
  5. Pensamiento limitado: La falta de colaboración interdepartamental y la innovación indican que los OKR son necesarios para clarificar roles y fomentar la sinergia hacia objetivos comunes.

Implementar las OKR promueve la claridad, la medición correcta de resultados, la agilidad estratégica, y el trabajo en equipo alineado hacia metas claras y compartidas.

Aquí también compartimos un interesante artículo de OKR Internacional con Diez ejemplos innovadores de OKA en logística.